Antología, Francisco Massiani
 

Francisco Massiani (Caracas, 1944- ), poeta, novelista, cuentista y dibujante es autor de dos novelas, Piedra de mar (1968) y Los tres mandamientos de Misterdoc Fonegal (1976), y de las colecciones de cuentos Las primeras hojas de la noche (1970) y El llanero solitario tiene la cabeza pelada como un cepillo de dientes (1975). Su primera novela, Piedra de mar, ha constituido un best seller a todo lo largo de los casi treinta años de su primera edición. Se trata de una novela de formación, una especie de Bildungsroman, en la cual se narran las peripecias de un adolescente de la clase media de Caracas por los lugares que le son cercanos al sitio donde vive, el cual es el ámbito de su existencia. Los relatos que forman sus libros Las primeras... y El llanero solitario ... vuelven sobre estos asuntos, sobre la adolescencia de sus personajes, sobre su especial mundillo. Entre sus narraciones cortas, la titulada Un regalo para Julia ocupa un lugar destacado dentro del cultivo del cuento contemporáneo en las letras venezolanas.

Esta edición de su obra poética tiene un prólogo de Rodrigo Blanco Calderón donde sostiene que estos poemas de Pancho Massiani "nos recuerdan o nos confirman que hemos estado vivos o que de hecho estamos vivos, o que en algún momento, y esta es la promesa tierna que guardan sus versos, lo estaremos. Son poemas que a su vez son postales que reconstruyen ambientes de algunas ciudades (Barcelona, París, Cádiz) que de una u otra manera el autor nunca ha abandonado. Son poemas y también son botellas cargadas de vino, cartas vidriosas que un náufrago lanza al mar. Son como esas piedritas blancas, hermosas y diminutas, que a veces se encuentran en las orillas de la playa, en el repliegue del agua y del tiempo, o en el cauce de algún río de la juventud. Pancho Massiani ha venido recolectándolas a través de los años, limpiando sus superficies planas y romas, para que la vida siga refulgiendo entre esas vetas azules, verdes, amarillas, rojas o violetas, que son las de sus poemas y también las de sus pasteles, y que quizás dibujan el eterno amanecer de nuestras eternas emociones."