Efraín Bocafloja

Su oficio es la simulación, la literatura desechable y la pose artificial de escritor maldito. Después de leer a Efraín el lector queda con la sensación de haberse atragantado con toneladas de papas fritas.

Efraín Medina Reyes es un escritor Cartagenero que ha tenido un relativo éxito editorial gracias a sus declaraciones irreverentes para la prensa frívola del país. Es el enfant terrible de las señoras bogotanas que se sonrojan cuando leen que un personaje de su primera novela tiene una “verga de 25 centímetros en días calurosos”. Critica lo frívolo, lo superficial, lo vacío y se burla de la cultura del entretenimiento a través de unas novelas que son sin duda, lo más entretenido, frívolo, superficial y vacío que ha dado la literatura colombiana en mucho tiempo.

Efraín tiene un personaje al que le dicen bocafloja y creo que este apodo es un dibujo exacto del autor. En una entrevista para El Cartel Urbano dice que los nuevos escritores colombianos “escriben maricadas”. Efraín también. Sus novelas son bostezos de una literatura municipal encallada en la pretensión de universalidad. En el afán de escandalizar con un lenguaje que, según él, proviene de sus tempranas lecturas de Charles  Bukowski, pero que en realidad proviene de las malas traducciones que hace Anagrama del escritor norteamericano. Para escribir como Bukowski no basta con soltar tres palabrotas callejeras en el párrafo. El lenguaje de Bukowski es la respuesta a una época de crisis tanto personal como social. Efraín intenta copiarlo sin conocer los contextos. Sin conocer la lenta maduración que la vida desarrolla en un hombre para darle esa conciencia del lenguaje, esa estética del desencanto que es lo distintivo en las obras de Bukowski o de Miller.

Dice también que “Héctor Abad es una tía que escribe novelas para tías”. Y a mí en cambio me parece que Héctor Abad es un buen escritor y que Efraín escribe como un sobrino que quiere ser tan bueno como la tía a la que odia.

Dije que Efraín es un bocafloja. Porque se la pasa lanzando improperios contra la farándula colombiana: contra la cultura light que tanto desprecia. Y ese mundillo que ha sido objeto de burlas por parte de Efraín lo contrató para que dirigiera la revista El Gran Hermano: una revista frívola que daba cuenta de los chismes del reality del mismo nombre. Efraín se tragó toda su irreverencia. O peor aún: la irreverencia de Efraín tiene precio. Y por unos cuantos pesos dejó de fingir y se convirtió en lo que realmente es: una pieza más de la industria del entretenimiento. De modo que asumió la dirección de la revista y allí se dio cuenta que sus novelas se vendían mejor si formaba parte del espectáculo. Por eso aceptó la propuesta de otra revista frívola para hacerse una cirugía en el rostro y contarlo en una crónica. Hoy sigue posando como un escritor irreverente, pero en realidad él es eso que los franceses llaman “rastacuero”, es decir, un hispanoamericano que jamás podrá ser lo que dice que es. Porque su oficio es la simulación, la literatura desechable y la pose artificial de escritor maldito. Después de leer a Efraín el lector queda con la sensación de haberse atragantado con toneladas de papas fritas.

Renson Said Sepúlveda

Efraín Medina Reyes, (Cartagena, 1967), recibió en 1985 el 2do premio del Concurso Nacional de Poesía ICFES. En 1986, ganó los concursos nacionales de cuento en Barranquilla y en Medellín. En 1991, fundó con su amigo Ciro Díaz, la empresa Fracaso Ltda. En 1995, obtuvo el Premio Nacional de Literatura Colcultura con “Cinema árbol y otros cuentos”. En 1997, primer lugar del Concurso Nacional de Novela del Ministerio de Cultura con “Erase una vez el amor pero tuve que matarlo” cuya versión italiana fue publicada por Feltrinelli. En 2002, participó como jurado en el Festival Internacional de Cine de Venecia y publicó su novela “Técnicas de masturbación entre Batman y Robin”. En 2003, se editó “Sexualidad de la Pantera Rosa”. En 2005, durante la Feria Internacional del libro de Bogotá, lanzó una colección de poemas bajo el título “Pistoleros/Putas y Dementes” (Greatest Hits). Para diciembre anuncia su nueva novela “La mejor cosa que nunca tendrás”.